La Asociación Empresarial del Campo de Belchite ha instado a las administraciones públicas a actuar con celeridad y eficacia para restituir, en el menor tiempo posible, lasinfraestructuras y servicios destruidos por la riada que asoló parte de la comarca el pasado viernes.
Aunque celebran que no haya habido daños personales, desde la entidad alertan de los efectos devastadores que la catástrofe está generando sobre la actividad económica del territorio. “Estamos totalmente paralizados. Las principales vías de comunicación entre los municipios han desaparecido, y las previsionesindican que no se restablecerán hasta dentro de seis meses”, denuncia Marta Urieta Lázaro, presidenta de la asociación.
En estos momentos, los desplazamientos entre localidades deben realizarse por caminos agrícolas y carreteras de un solo carril, lo que dificulta gravemente el acceso a servicios y el transporte de mercancías. “La carretera de Belchite a Lécera, el puente de entrada a Almochuel, el acceso a Almonacid de la Cuba o la carretera de Azuara a Moyuela son fundamentales y deben ser restituidos con urgencia”, subraya Urieta. Preocupa especialmente el cierre de la A-222 en Belchite, donde reventó el puente del río Aguas Vivas. Esta vía da entrada desde Zaragoza a parte de la comarca Campo de Belchite y a las Cuencas Mineras. “Los efectos del cierre se están notando también en los negocios de la carretera y en el transporte de mercancías. Las rutas alternativas requieren más de media hora de tiempo”, especifica.
En cuanto a los servicios básicos, los empresarios advierten de que el restablecimiento del suministro de agua, luz y sanidad debe ser tratado como una prioridad absoluta. La situación afecta directamente a la ciudadanía, pero también al funcionamiento diario de empresas, comercios y explotaciones agrarias.
Uno de los sectores más castigados ha sido el turístico, especialmente en Almonacid de la Cuba, donde la riada ha arrasado completamente la infraestructura desarrollada en torno a la presa romana, uno de los principales activos patrimoniales y turísticos de la zona. Desde la asociación también se reclama que las ayudas económicas lleguen con rapidez y sin trabas burocráticas. “No puede ser que ahora estén mareando a los vecinos con trámitesinterminables y documentación absurda. Necesitamos agilidad, no obstáculos”, insisten.
Asimismo, la organización ha querido poner en valor el trabajo voluntario que autónomos y pymes están realizando desde el primer momento: “Muchos han dejado su actividad profesional para ayudar, aportando maquinaria, recursos y tiempo, lo que supone también una pérdida de ingresos para ellos”, destaca la entidad